Nadie se hace la gran pregunta: “¿Quién soy?” Todos siguen cumpliendo un papel, generalmente decidido por los demás; como el éxito y el fracaso, todos son lo que se ve: sus cuerpos o sus logros materiales. Y las cosas materiales son tan importantes que los amores que comienzan en los parques terminan en los tribunales.
Reconozco muchas caras y conozco algunos nombres, pero pocos son los individuos que saben quiénes son.
El nombre y el OFICIO son distracciones, “cárceles”, limitaciones, un camino que nos marcan y seguimos ciegamente tan ocupados nos mantienen que no nos paramos a pensar quienes somos.
La casa de uno, es uno, por eso yo estoy bien en todas partes.
La santidad es la meta prevista para todos, aunque pocos se animen a entrar en los caminos que llevan a ella.
Abandonado el ego comienzan los milagros. El ego cree que las palabras son las cosas, no vive: interpreta. En tanto, la inocencia trata a todos por igual, por eso está más cerca de la felicidad.
Recuerda que Jesús digo: – Cosas más grandes verán, cosas más grandes harán.
Y… ¿qué sucedería si nos juntáramos todos desde el cada uno que hay en cada cuál?
“Maestro, ¿cuál es el mandamiento mayor de la ley”. Esta era la pregunta que le hacían a Jesús los fariseos, que ponían toda su religiosidad en el cumplimiento estricto de todos los mandamientos de la Ley, que en aquel momento eran unos 613. Jesús, se los resumió todos en dos: Amar a dios y al prójimo.
Que no te confunda el noticiero ni ningún medio: El bien es mayoría. Lo que se pretende es que todos estemos contra todos y esto nos ha agotado y desesperanzado, por eso hemos perdido la imaginación que podría darnos alguna idea de convivencia.
El miedo que es ignorancia., nos separa más y más y este divorcio nos enferma a todos.
Todos venimos de un primer hombre y una primera mujer. Entonces hay negros y chinos en mí. Soy tan bueno como Jesús y tan peligroso como Hitler. Soy tan musulmana como ateo. Muero con el que muere y nazco con el que nace.
Nos combatimos en lugar de asociarnos.
La vida es como es, no como debería ser. Todos nos fue dado por lo tanto nos pertenece. Solo nos queda gozar lo que tenemos y cuidarlo para el que vendrá.
Conoceis
http://elsecretodelasestrellas.wordpress.com/
gracias a josé villar y juan carlos rodriguez por su labor